Posted by El Yorch | Posted in Andrew Bujalski , Computer Chess , RMFF | Posted on 22:21
En serio, he pensado mucho en encontrar las palabras que describan con
mayor exactitud esta película y creo que la única que he encontrada es: rara.
Es una de esas películas que no se repetirá en estilo, cadencia y humor
en mucho tiempo, me ha dejado con muchas dudas y no se si decir que la película
me ha parecido buena o mala.
Cuando llegué al lugar de la proyección, se veía tan estéticamente
correcto que me imaginé que la película seria igualmente buena. Cuando después
de ver un comercial de una bebida alcohólica por 7 veces en la pantalla de
proyección, tuve una sospecha que lo que estaba a punto de ver no era
exactamente lo que esperaba.
Una película que inicia al estilo de documental con una cinta en blanco
y negro, montando una rueda de prensa en un hotel en donde se anunciaba la
competencia entre máquinas vs máquinas, desafiándose en partidas de ajedrez. La
competencia entre las computadores están obviamente respaldadas por todo un
equipo que programa, corrige y prueba al límite sus capacidades para entender y
mimar a sus artefactos, un grupo de freaks, geeks conviviendo en
conjunto, la vencedora de las máquinas tendría el honor de pasar al
máximo reto, ¡Enfrentar a un humano ajedrecista y de los mejores!
Es curioso pensar que en esos años todavía se daba por hecho que ninguna
máquina podía vencer al ser humano, al menos en esa disciplina. El film está
ambientado en 1982, es una comedia en sentido clásico pero no del gusto de
todos, está rodeada de una estética intencionalmente irreal y extrañamente
torpe.
Sin embargo viene la parte mala, la difícil de convencer, la difícil de
ver por que a veces resulta incomprensible ese universo paralelo que se vive
entre los antiguos ñoños de los 80’s enclaustrados en un hotel, por momentos la
excesiva y pedante intelectualidad de su diálogos la hacen tan aburrida, sin
contar que carece totalmente de clímax.
Una rareza, que como muchas cosas del estilo, conviene
verla (al menos para mi) solo una vez, y contarla como un intento sobresaliente
de hacer una película con muchos experimentos, utilizando de pretexto la
temática del ajedrez, que prometía mas intriga matemática y de inteligencia
artificial como antesala a la década que vivimos, pero que se fue por el camino
de probar, referenciar igualar en algunos aspectos a esos años, y retomar el
aspecto underground que posiblemente se vivió, terminé de comprobar que no convenció cuando en algún momento de la película
me dormí por escasos minutos, para mi sorpresa otras personas a mi
alrededor estaban en la misma situación, no se si era el espacio tan relajante,
la película que no invitaba a adentrarte o una mezcla de las dos.